Los alimentos fermentados forman parte de nuestra dieta desde hace siglos.
A lo largo de la historia la técnica principal de conservación de los alimentos ha sido la fermentación.
El ser humano ha usado este proceso de transformación para darle una nueva vida a todos los productos que tenía a su alcance, consiguiendo así, que los alimentos fueran más nutritivos, seguros y duraderos.
Pero, ¿qué es un alimento fermentado?
Los fermentados son alimentos que contienen probióticos.
Éstos, son microorganismos vivos que promueven beneficios en la salud gracias a que ayudan a un mejor funcionamiento de nuestra flora intestinal, refuerzan el sistema inmunológico y absorben y asimilan mejor los nutrientes.
¿Porqué es tan importante tomar probióticos con regularidad?
Los beneficios que se les atribuye a los fermentados son los siguientes:
- Los fermentos son una fuente de nutrientes como vitaminas, minerales y enzimas. Principalmente aportan: Vitamina C (repollo, col rizada y acelgas), vitamina K2 (en especial el natto) y varias vitaminas del grupo B.
- Cuidan nuestro sistema inmunitario. Los probióticos ayudan a producir anticuerpos impidiendo el crecimiento de microorganismos patógenos en la flora intestinal.
- Nos ayudan a combatir las alergias: Las reacciones alérgicas se deben a un desequilibrio en el sistema inmunológico. Una cantidad adecuada de probióticos regula su funcionamiento y contribuye a disminuir este tipo de episodios.
- Las bifidobacterias y lactobacilus que existen en los alimentos fermentados nos ayudan a regular la ansiedad y el estrés.
- Nos ayudan en la correcta asimilación de nutrientes, convirtiendo los alimentos en más digeribles.
- Alcalinizan nuestra sangre, ayudan a mantener un buen nivel de PH.
- Enriquece el sabor de los alimentos. Aumenta la profundidad y riqueza de sabor aportando nuevas texturas y colores.
En nuestro día a día consumimos una gran variedad de productos fermentados; los más habituales son el pan, el vino, los yogures y los quesos, los encurtidos,…Pero hay muchos otros no tan conocidos en nuestra cultura que resultan muy interesantes. ¿Conoces algunos de los siguientes?
Chucrut
Se obtiene haciendo fermentar hojas de col de repollo en agua con sal (salmuera); es una comida muy típica de Alemania y Alsacia (Francia).
Kimchi
Es una comida de origen coreano elaborada a base de distintos vegetales sazonados con distintas especias, la receta más popular utiliza col china como ingrediente base. ¿Quieres conocer la receta fácil de kimchi para hacer en casa? Aquí la tienes.
Kéfir
Es un producto lácteo fermentado a través de la acción de un conjunto de levaduras y bacterias, es similar al yogur pero con consistencia más líquida. Tiene su origen en los pueblos del Cáucaso. En este artículo te cuento cómo hacer kefir de agua.
Derivados de la soja
Como el miso, preparación culinaria originaria de Japón con una consistencia pastosa y color amarronado que se elabora con soja fermentada, sal marina y cereales como el arroz y la cebada, y como el tempeh, un producto originario de Indonesia derivado de la fermentación de la soja que se suele presentar en forma de pastel.
Kombucha
Es una bebida ancestral procedente de China hecha a partir de la fermentación de té azucarado tras un cultivo simbiótico de bacterias y levadura sanas, más conocido como SCOBY.
Es la bebida de moda. Lee más sobre las 4 mejores kombuchas aquí.
¿Te animas a entrar en el maravilloso mundo de la fermentación?
Si sientes curiosidad por seguir conociendo más sobre fermentados, los procesos básicos, todas las técnicas y recetas te recomiendo encarecidamente la lectura de la obra del gran gurú de la fermentación: Sandor Katz. El arte de la fermentación. Editorial Gaia. Se trata de la guía más completa y definitiva que se ha publicado hasta la fecha sobre la fermentación doméstica.
¿Fermentamos?
Los alimentos fermentados forman parte de nuestra dieta desde hace siglos.
A lo largo de la historia la técnica principal de conservación de los alimentos ha sido la fermentación.
El ser humano ha usado este proceso de transformación para darle una nueva vida a todos los productos que tenía a su alcance, consiguiendo así, que los alimentos fueran más nutritivos, seguros y duraderos.
Pero, ¿qué es un alimento fermentado?
Los fermentados son alimentos que contienen probióticos.
Éstos, son microorganismos vivos que promueven beneficios en la salud gracias a que ayudan a un mejor funcionamiento de nuestra flora intestinal, refuerzan el sistema inmunológico y absorben y asimilan mejor los nutrientes.
¿Porqué es tan importante tomar probióticos con regularidad?
Los beneficios que se les atribuye a los fermentados son los siguientes:
- Los fermentos son una fuente de nutrientes como vitaminas, minerales y enzimas. Principalmente aportan: Vitamina C (repollo, col rizada y acelgas), vitamina K2 (en especial el natto) y varias vitaminas del grupo B.
- Cuidan nuestro sistema inmunitario. Los probióticos ayudan a producir anticuerpos impidiendo el crecimiento de microorganismos patógenos en la flora intestinal.
- Nos ayudan a combatir las alergias: Las reacciones alérgicas se deben a un desequilibrio en el sistema inmunológico. Una cantidad adecuada de probióticos regula su funcionamiento y contribuye a disminuir este tipo de episodios.
- Las bifidobacterias y lactobacilus que existen en los alimentos fermentados nos ayudan a regular la ansiedad y el estrés.
- Nos ayudan en la correcta asimilación de nutrientes, convirtiendo los alimentos en más digeribles.
- Alcalinizan nuestra sangre, ayudan a mantener un buen nivel de PH.
- Enriquece el sabor de los alimentos. Aumenta la profundidad y riqueza de sabor aportando nuevas texturas y colores.
En nuestro día a día consumimos una gran variedad de productos fermentados; los más habituales son el pan, el vino, los yogures y los quesos, los encurtidos,…Pero hay muchos otros no tan conocidos en nuestra cultura que resultan muy interesantes. ¿Conoces algunos de los siguientes?
Chucrut
Se obtiene haciendo fermentar hojas de col de repollo en agua con sal (salmuera); es una comida muy típica de Alemania y Alsacia (Francia).
Kimchi
Es una comida de origen coreano elaborada a base de distintos vegetales sazonados con distintas especias, la receta más popular utiliza col china como ingrediente base. ¿Quieres conocer la receta fácil de kimchi para hacer en casa? Aquí la tienes.
Kéfir
Es un producto lácteo fermentado a través de la acción de un conjunto de levaduras y bacterias, es similar al yogur pero con consistencia más líquida. Tiene su origen en los pueblos del Cáucaso. En este artículo te cuento cómo hacer kefir de agua.
Derivados de la soja
Como el miso, preparación culinaria originaria de Japón con una consistencia pastosa y color amarronado que se elabora con soja fermentada, sal marina y cereales como el arroz y la cebada, y como el tempeh, un producto originario de Indonesia derivado de la fermentación de la soja que se suele presentar en forma de pastel.
Kombucha
Es una bebida ancestral procedente de China hecha a partir de la fermentación de té azucarado tras un cultivo simbiótico de bacterias y levadura sanas, más conocido como SCOBY.
Es la bebida de moda. Lee más sobre las 4 mejores kombuchas aquí.
¿Te animas a entrar en el maravilloso mundo de la fermentación?
Si sientes curiosidad por seguir conociendo más sobre fermentados, los procesos básicos, todas las técnicas y recetas te recomiendo encarecidamente la lectura de la obra del gran gurú de la fermentación: Sandor Katz. El arte de la fermentación. Editorial Gaia. Se trata de la guía más completa y definitiva que se ha publicado hasta la fecha sobre la fermentación doméstica.
¿Fermentamos?
